LULU MATEWOS: ESTAMOS CONTIGO
Lulu
Matewos es un niño de 14 años que vivía en Areka (Etiopía) con su madre, su
única familia. Estudiaba en la escuela y ya se manejaba un poco con el inglés.
Este año 2013, su vida ha dado un cambio radical para él y su madre.
En
enero ingresó en el Pequeño Hospital de Dubbo y tras realizarle las pruebas
necesarias, el diagnóstico no fue nada bueno, padecía una tuberculosis ósea,
que le afectaba a la columna vertebral, causando la destrucción de las
vértebras. Tras un mes de reposo y tratamiento, y dado el avanzado estado en el
que estaba, Lulu empeoró progresivamente, las vertebras se fueron destruyendo y
afectó a la médula, por ello ha perdido la movilidad de sus piernas.
A
pesar de esta situación pasados un par de meses parecía que ya estaba todo
solucionado, se manejaba bien dando paseos por los pasillos del hospital con
una silla de ruedas, y los dolores poco a poco iban disminuyendo.
Pero
su alegría duró poco tiempo, en pocos días le apareció una pequeña herida en la
parte superior del brazo izquierdo, y tenía grandes dolores, la infección se
iba extendiendo y no podía mover el brazo, además estaba totalmente hinchado y
supuraba.
Los
doctores comienzan a realizar las pruebas pertinentes para saber de dónde
proviene esta infección tan severa, se le realizan unos análisis completos, que
se mandan a analizar a Addis Abeba, pero ¡estamos en Etiopía!, y los resultados
tardan más de dos meses en llegar.
El
diagnóstico en un principio no es muy alentador, parece ser que es osteomielitis,
producida como resultado de una infección bacteriana en la corriente sanguínea
y que se propaga en el interior del hueso, en este caso en el húmero.
La
infección corre como la espuma y en cinco meses Lulu tiene el brazo fatal y con
grandes dolores. Visto que los resultados de la analítica no han llegado
después de tanto tiempo, decidimos trasladarlo al Soddo Christian Hospital; un hospital
privado en la capital de la provincia de Wolayta, en Soddo; ya sólo para
ingresar hay que dar 5.000 birr (200 euros). Allí esperamos que se agilicen un
poco las pruebas. El día 20 de agosto se realiza el traslado e ingreso para
comenzar rápidamente con las pruebas necesarias. Dos días después ya tenemos
los resultados y el diagnóstico no es nada bueno, parece ser que Lulu tiene
gangrena en el brazo y hay que amputarlo lo antes posible.
Le operaron el día 23 de agosto
y el domingo 25, antes de volver para España pasamos a visitarle, ya sonreía,
los dolores habían desaparecido y los doctores nos comentaron que todo había
salido bien; que tendría una recuperación lenta pero que saldría adelante. La
fuerte medicación que está tomando, la inmovilidad debida a su parálisis y las
pocas defensas con las que cuenta hacen que tenga las piernas muy hinchadas;
pero con una buena alimentación, higiene y los cuidados necesarios saldrá
adelante.
Tanto Lulu como su madre están
felices, a pesar del cambio tan grande en sus vidas, Lulu, su único hijo, está
vivo y los dos juntos harán frente a todo lo que les venga con mucho amor
mutuo.
Lulu es un ejemplo de valentía y de amor a la vida, ahora tiene que aprender a
vivir con sus limitaciones, que no son pocas, pero a pesar de todo, siente la alegría de estar vivo. Y nosotras de
haberle ayudado.
Lulu, los 9.227 km que nos separan no
harán que dejemos de ayudarte y de estar contigo con la mente y el corazón, ¡cuenta
con nosotros!.