- Un paquete grande de FAMILIA y AMIGOS.
- Tres tazones de PACIENCIA.
- Diez cucharadas de SONRISAS variadas.
- Doce vasos grandes de ESPERANZAS, SUEÑOS e ILUSIONES.
- Seis cucharas de PAZ y PERDÓN.
- Pizcas de AMOR (ingrediente muy importante, se puede abusar de él).
- Para terminar muchos toques de CORAZÓN y AGRADECIMIENTO.
1.- Reúnete con tu familia y tus amigos, y toma varias medidas de ilusión, una pizca de amistad y un gesto de ternura.
2.- Agrega unas cuantas risas y alguna sonrisa; revuelve todo con bondad, y echa unas pizcas de paz y perdón.
3.- Poco a poco ve incorporando tus sueños y tus ilusiones.
4.- Hornea la mezcla con ánimo y paciencia, y deja que la esperanza crezca en tu corazón.
5.- Una vez terminada la receta, agrega todo el amor y el agradecimiento que tengas y muchísimo cariño.
6.- Adorna la receta con el calor de tus esperanzas, envuélvela en el amor y la paz, con risas, luces y canciones.
7.- Decórala con optimismo y finalmente, ofrécela con el corazón.
No siempre los ingredientes de la vida son gustosos, por lo tanto hay que saber mezclarlos como se van ofreciendo, presentarlo y hacer con todos ellos un plato de buen sabor.
No olvidéis tener cerca esta receta, es una receta saludable que podemos hacer cualquier día del año y tener el espíritu de la Navidad incluso cuando no se esté en diciembre.